domingo, 6 de abril de 2008

Los gigantes de Pamplona - Fiacro Iraizoz Espinal

El postéo de hoy es el más Daneri de todos. Ya que tiene un gran motivo que justifica la entrada y eclipsa todo alegato referido al autor, contenido, gracia y forma y la hace grande per se.
Esta razón es ulterior a la poesía y ajena a su sentido semántico: a sus 82 años, y a pesar de su Alzheimer, me la recitó mi abuela. Entera y sin dudar.
Del caleidoscopio anacrónico de su mente, les dejo este fragmento de tiempo traído de su España natal.
Con Uds.: la poesía que Fiacro Iraizoz Espinal le dedicó a su hijo, Los gigantes de Pamplona.


Los gigantes de Pamplona

Fiacro Iraizoz Espinal

¿Oyes las notas vibrantes
de esa gaita tan chillona?
Pues espera unos instantes,
que vas a ver los gigantes,
los gigantes de Pamplona.

Recuerdo que en mi niñez,
alegre más de una vez,
delante de ellos corrí.
Con que osada timidez,
les gritaba: "¡Aquí, Aquí!".

En tus ojillos brillantes
y en tu sonrisa burlona
veo instintos "alarmantes"
de correr con los gigantes,
los gigantes de Pamplona.

Pero espérate, que quiero
que los veas al pasar;
mira, ya llega el primero
detrás del tamborilero
bailando a todo bailar.

- ¡Es un rey! ¡y que elegante!
¡Cuánto adorno! ¡Cuánto fleco!
- ¿Ves que serio y que arrogante?
Pues bien, por fuera es "gigante",
pero por dentro está hueco.

¡Hoy es pronto todavía!.
¡Tal vez te acuerdes un día
del gigantón de Pamplona,
al ver bajo una corona
una cabeza vacía!.

-¡Y baila con mucho brío!
¡Cuántas vueltas! - ¿Que te chocan?.
¡De tu inocencia me río!
¡Los monarcas, hijo mío,
bailan al son que les tocan!.

- ¡Otro gigante detrás!
¡Y es mujer! ¡La quiero ver!
- Acércate y la verás.
- Di, papá, ¿y esa mujer
es igual que las demás?

- No es igual; pero no obstante,
todas parecidas son,
pues, lo mismo que el gigante,
tienen hermoso el semblante
y el corazón de cartón.

- ¡Ya llega otro, y otro, sí!
¿Y quienes son esos, di?
- Son retratos en colores
de esos graves pensadores
como hay muchos por ahí.

De inmóvil fisonomía,
que hablan poco y hablan tarde,
y se pasan noche y día
haciendo ostentoso alarde
de inmensa sabiduría.

- ¿Y esos últimos que veo?
¡Son negros! ¡Qué atrocidad!
¡Qué rostro tienen tan feo!
Si son negros, como creo,
serán muy malos, ¿verdad?.

- No tanto como supones;
en el mundo, cosa rara,
hay otros santos varones,
que tienen blanca la cara
y negras las intenciones

Ya acabaron de pasar;
ya se alejan tan gentiles,
bailando a todo bailar
esa danza popular
de gaitas y tamboriles.

- ¿Quieres seguirles? ¡Corriente!
Si eso te ha de divertir,
corre alegre entre la gente,
pero ten siempre presente,
lo que te voy a decir:

Sé humilde tu vida entera;
huye siempre de un encuentro
con esa gente altanera
que va mostrando por fuera
lo que no tiene por dentro.

- Y piensa que hay mil farsantes
de apariencia fanfarrona,
muy soberbios, muy boyantes
¡Y son como los gigantes,
los gigantes de Pamplona!

8 comentarios:

Tormentas dijo...

...

tan versátil como acústica dijo...

supongo que hay una función de mensaje que requiere de un contexto del que no dispongo para comentar con acierto esta entrada. felicitaciones por el nuevo blog.

Apenas dijo...

Buenas, ser invisible yo soy.
Qué linda es tu abuela...
Qué bueno ver la cara de Rodolfo Walsh.
Qué bien hace leerlo.
Conocés sus cuentos no policiales? es muy muy groso.
la panza por los ojos al final explotó...pero...
Saludos!
B

Juan Duque Oliva dijo...

Genial, Pamplona lo llevo en el recuerdo y su gran teatro, que de buena gente

Daneri dijo...

Ju4mp4: Y4 3570Y 4N074D0 3N V4R105 C0M0 P0DR4S V3R, GR4C145 P0R L4 1NV1T4C10N.

Napoleón: ...

tan versátil como acústica: Grax por las felicitas, no es muy nuevo, pero tpoco tiene tanto uso...

Apenas: Ud. y sus comentarios siempre serán un valor agregado a las entradas de mis blogs, lástima lo de panza, era de mis favoritos.
No conozco los policiales de Rodolfo Walsh pero estoy a tiempo aun.

Luz de Gas: Me debo conocer Europa, ya llegará el día.

Anónimo dijo...

Lo he encontrado buscando la poesìa, justo para explicarles a unos amigos que mi abuela no se acuerda de lo que comiò ayer, pero si de las poesìas que aprendiò de nigna.

Un abrazo

JOSEP A. PEDRET RAMOS dijo...

Hola, el poema que expones, es a la vez para mi y para ti la misma fuente nuestros mayores. LO que quisiera saber es como hallaste el autor y si sabes del libro en que estuvo publicado el poema, o aun lo esta.
Es emocionante oir a mi madre aquejada de una enfermedad, recitarlo cada vez que se lo piden.
Muchas gracias por facilitarme el autor.
Espero que me halles los libros donde se publicó.graciass

Daneri dijo...

lorenzo:
Es increíble como recuerda esas cosas. Me emociona cuando le pasa eso.
Yo no recuerdo ni mis propias poesías. Lo mio es vergonzoso!!

japr:
Realmente no se en que libro se encuentra el poema, el nombre del escritor me costó una larga búsqueda en la net.
Si me pasas tu dirección, puedo pasarte algunos textos que hallé de este autor.
Saludos!